Kithulgala Belilena
Kithulgala Belilena, una de las cuevas antiguas más atractivas y vitales del país, guarda el secreto de una era perdida hace unos 12.000 años. Se puede llegar a la cueva conduciendo aproximadamente 80 km a través de la carretera Colombo-Hatton. Hay pruebas significativas para determinar la opinión del Dr. PEP Deraniyagala de que los asentamientos humanos en Sri Lanka podrían haber comenzado tan antiguo como el Pleistoceno. El conocimiento sobre Homo Sapiens que vive a 624 m sobre el nivel del mar relacionado con el Pleistoceno encontrado en Kithulgala Belilena, un asentamiento humano principal adyacente al río Kelani, fue de gran ayuda para mejorar el conocimiento sobre los aborígenes.
Se han identificado dos huesos fosilizados de antropoides que vivieron hace 3.000 años y hace 22.000 años que tienen relación directa con el período 12.000 a. C. a través de excavaciones realizadas en Belilena.
A. Fa Hien-Lena: desenterrando los orígenes Fa Hien-Lena, uno de los primeros sitios conocidos asociados con el Hombre Balangoda, ha brindado información invaluable sobre las primeras etapas de la habitación humana en Sri Lanka. La datación por carbono de los artefactos recuperados de Fa Hien-Lena sugiere una edad de aproximadamente 37 000 años AP (antes del presente), lo que marca un hito importante en la comprensión de la línea de tiempo de los asentamientos humanos en la isla.
B. Batadomba-lena: rastreando las huellas Batadomba-lena, otro sitio de cueva prominente, ha producido herramientas prehistóricas que datan de 31,000 AP. Estos artefactos proporcionan evidencia crucial de los avances tecnológicos del Hombre Balangoda durante esa época. Los descubrimientos realizados en Batadomba-lena cierran la brecha entre el período Fa Hien-Lena y los desarrollos posteriores en la región.
C. Otros artefactos: descubriendo el pasado Junto con restos óseos y herramientas, las cuevas de Belilena han ofrecido a los arqueólogos un tesoro oculto de artefactos prehistóricos. Estos incluyen herramientas que datan de aproximadamente 30,000 AP, que arrojan luz sobre las habilidades avanzadas y el ingenio del Hombre Balangoda. La importancia de estos hallazgos se extiende más allá de Sri Lanka y contribuye a nuestra comprensión del desarrollo humano en Asia.
El descubrimiento de herramientas similares a las encontradas en Europa alrededor del año 12.000 AP ha desafiado las suposiciones predominantes sobre la línea de tiempo del desarrollo humano. El Hombre Balangoda de Sri Lanka, con dispositivos que datan de 19.000 años antes, muestra un camino paralelo de progreso. Estos hallazgos enfatizan la importancia de las cuevas de Belilena y su papel en la reescritura de la narrativa de la historia humana.
El juego de herramientas del Hombre Balangoda se distingue por la presencia de microlitos geométricos, que comprenden pequeñas lascas de cuarzo y, ocasionalmente, pedernal. Estos copos se han moldeado hábilmente en formas semilunares, triangulares y trapezoidales estilizadas. Los microlitos geométricos se han asociado convencionalmente con el período Mesolítico, como se definió por primera vez en Europa. Sin embargo, las cuevas de Belilena han desafiado esta noción.
Las fechas más tempranas para la tradición microlítica geométrica en Europa son alrededor de 12.000 AP. Sin embargo, sorprendentemente, se han descubierto herramientas similares ya en 31 000 BP en Batadomba-lena, más de 30 000 BP en Belilena y 28 000 BP en dos sitios costeros en Bundala. Este hallazgo revela que Europa tardó relativamente en manifestar esta tradición tecnológica, lo que plantea preguntas intrigantes sobre las razones detrás de esta discrepancia. Otros descubrimientos de microlitos geométricos en varias partes de África sugieren una narrativa más compleja del desarrollo humano.
Para llegar a las cuevas de Belilena, siga la carretera que conduce al templo de Kitulgala en Iyanwatta Road. Desde allí te espera una caminata de aproximadamente un kilómetro que te llevará hasta la entrada de la cueva. Mientras recorre los verdes alrededores, sumérjase en la belleza natural de la zona mientras anticipa las maravillas que se encuentran en su interior.
Las cuevas de Kithulgala Belilena sirven como puerta de entrada al pasado antiguo de Sri Lanka, ofreciendo vislumbres del hombre prehistórico Balangoda y sus notables logros. Los descubrimientos realizados dentro de estas cuevas han desafiado las teorías convencionales, retrasando la línea de tiempo del desarrollo humano en la región por miles de años. Además, al explorar los intrincados detalles de las herramientas y artefactos encontrados, obtenemos información valiosa sobre el ingenio y el ingenio de nuestros antepasados.
Revelar los misterios de Kithulgala Belilena enriquece nuestra comprensión de la historia antigua de Sri Lanka y contribuye al discurso más amplio sobre la evolución humana y el desarrollo cultural.